Un día como hoy, 27 de octubre pero de 1957, el arzobispo de Guadalajara, Cardenal Juan Sandoval Iñiguez fue ordenado sacerdote en Roma, en la solemnidad de Cristo Rey. Sonriente, tranquilo y con una paz que la refleja a través de su mirada, al cumplir 53 años de haber sido ordenado sacerdote, dice estar contento y agradecido con Dios por tantas bendiciones que ha recibido a lo largo de todo este tiempo y de su vida, pero también agradece los tiempos de prueba que le ha entregado.
“Me siento muy alegre y contento con Dios porque en más de cincuenta años, he tenido muy pocos destinos, solamente tres: formador en el Seminario de Guadalajara por 27 años, seis años como obispo en Ciudad Juárez y aquí en la ciudad como Arzobispo”.
A lo largo de su vida como pastor, han sido muchas las alegrías y bendiciones que ha recibido, todas son importantes para él porque cada una le ha dado una alegría a su corazón y los momentos de prueba, también los ha sabido enfrentar porque le han dejado una enseñanza.
Consciente de que ya no espera más cargos para desempeñar porque sus años de servicio están llegando a su fin, Sandoval Iñiguez está seguro de que seguirá desempeñando de la mejor manera el papel que Dios le ha encomendado como pastor de los fieles católicos de Guadalajara. El Arzobispo de Guadalajara, Juan Sandoval Iñiguez, nació el 28 de marzo de 1933, en Yahualica, Jalisco, Diócesis de San Juan de los Lagos, en el seno de una familia con 12 hermanos. Es Licenciado en Filosofía y Doctorado en Teología Dogmática.
“Me siento muy alegre y contento con Dios porque en más de cincuenta años, he tenido muy pocos destinos, solamente tres: formador en el Seminario de Guadalajara por 27 años, seis años como obispo en Ciudad Juárez y aquí en la ciudad como Arzobispo”.
A lo largo de su vida como pastor, han sido muchas las alegrías y bendiciones que ha recibido, todas son importantes para él porque cada una le ha dado una alegría a su corazón y los momentos de prueba, también los ha sabido enfrentar porque le han dejado una enseñanza.
Consciente de que ya no espera más cargos para desempeñar porque sus años de servicio están llegando a su fin, Sandoval Iñiguez está seguro de que seguirá desempeñando de la mejor manera el papel que Dios le ha encomendado como pastor de los fieles católicos de Guadalajara. El Arzobispo de Guadalajara, Juan Sandoval Iñiguez, nació el 28 de marzo de 1933, en Yahualica, Jalisco, Diócesis de San Juan de los Lagos, en el seno de una familia con 12 hermanos. Es Licenciado en Filosofía y Doctorado en Teología Dogmática.
